El presidente de la Federación Alianza Evangélica Costarricense (FAEC), Ronald Vargas, inauguró el acto de celebración por los 75 años de servicio saludando a distintos líderes, pastores y referentes institucionales. También reconoció a representantes de alianzas de otros países y, de manera especial, a Danilo y Gloriana Montero, quienes estuvieron presentes especialmente para la ocasión.
“Un día como hoy, hace setenta y cinco años, en una Costa Rica muy diferente a la actual, un grupo de pastores, por la gracia y el favor de Dios, y gracias a su visión y esfuerzo, fundaron lo que hoy conocemos como la Federación Alianza Evangélica Costarricense”, expresó Vargas.
El presidente de la FAEC destacó que esta institución, a lo largo de siete décadas y media, ha representado y aglutinado a los distintos sectores de la iglesia evangélica costarricense. “Desde sus inicios, el espíritu que impulsó el nacimiento de la Alianza Evangélica fue totalmente inclusivo y representativo de toda la iglesia”, afirmó.
Vargas subrayó que la unidad de aquellos primeros pastores ha perdurado por 75 años. “Damos gracias a Dios porque esa unidad aún se mantiene”, sostuvo.
Asimismo, ratificó el compromiso de la FAEC de seguir fortaleciendo su labor: “Seguiremos enfocados en consolidar el trabajo de esos cinco pilares que sustentan nuestra labor, realizando una evaluación constante para responder al crecimiento y a las múltiples necesidades de una Costa Rica que también está cambiando”.
El dirigente exhortó a los presentes a mantener “esa fuerza de proclamar el Evangelio en Costa Rica, a tiempo y fuera de tiempo”. También recordó que la FAEC cuenta con reconocimiento oficial por parte de las entidades de gobierno, lo que permite llegar a espacios donde iglesias y denominaciones no acceden fácilmente. “Estoy hablando de los tres poderes de la República”, precisó, resaltando la representatividad alcanzada a nivel institucional.
Durante la ceremonia, Vargas llamó al escenario a los integrantes de la Junta Directiva, presentándolos por nombre, cargo y resaltando aspectos de su labor y personalidad. Posteriormente, se entregaron reconocimientos a presidentes y directores ejecutivos que ha tenido la FAEC en estos 75 años.
Más adelante, se recibieron los saludos del pastor Alejandro Espínola, secretario de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA), y de forma virtual, del pastor Juan Cruz Cellammare, presidente de la Alianza Evangélica Latina (AEL).
El mensaje central estuvo a cargo del pastor Danilo Montero, quien, tras un tiempo de adoración que él mismo dirigió, compartió una experiencia vivida en México. Relató cómo una mujer de escasos recursos lo hospedó junto a otros jóvenes, lo que le permitió comprender el verdadero significado de la Cena del Señor, basado en el pasaje de 1 Corintios 11:17-30 (NTV). “Todo esto se trata de cómo tratas a los demás”, señaló. “Hay que tener mucho cuidado al venir aquí. Hay que examinarse por si acaso uno ha pecado”, agregó, preparando el ambiente para la celebración de la Santa Cena.
Montero recordó su bautismo a los 14 años y la primera vez que participó de la Cena del Señor. Reflexionó sobre la importancia de acercarse no por sentirse digno, sino porque la mesa lo demanda. “Yo me acercaba a la mesa sin tener ojos para ver lo que había en ella”, confesó.
Con honestidad, evaluó si hoy predica profesionalmente o con un corazón rendido, y exhortó: “Acércate honrando lo que significa esta mesa”.
Finalmente, dejó un llamado claro: “Discierne el cuerpo, respétalo y acércate con honra. Porque si no lo haces, sufrirás”.
Para cerrar, Vargas tomó nuevamente la palabra y deseó que “no perdamos la sensibilidad de que somos un solo cuerpo, donde las banderas denominacionales quedan abajo, donde nuestros logos y egos no tienen cabida, y que en los próximos años seamos una respuesta como iglesia a lo que Costa Rica demande”.
El acto concluyó con una invocación a Dios y la dedicación de la iglesia en Costa Rica a su servicio para los años venideros.
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