
La Fraternidad Internacional de Agricultores Cristianos (FCFI, por sus siglas en inglés) se prepara para conmemorar un hito importante al celebrar su 40 aniversario en su conferencia anual en Kalamazoo, Míchigan, este julio. El evento, que promete tanto reflexión como una visión a futuro, conmemorará cuatro décadas de un influyente ministerio agrícola centrado en el evangelio y sentará las bases para los próximos 40 años de servicio.
“Esto no es solo una celebración, es un momento decisivo”, dijo el Director Ejecutivo Dan Janzen. “Es un momento para reafirmar nuestra misión de equipar a los agricultores cristianos para que generen un impacto duradero en sus comunidades, tanto espiritual como práctico”.
“En un mundo que anhela autenticidad y conexión, el modelo de servicio práctico del evangelio de la FCFI —a través de presentaciones del evangelio por todo Estados Unidos, cercas reconstruidas, crisis atendidas y el acompañamiento a las comunidades— continúa dando frutos transformadores.
“Esta conferencia de aniversario no es solo una celebración del pasado; es una plataforma de lanzamiento para un impacto futuro en cada condado, campo y hogar tocado por la agricultura, la fe y la fraternidad”.
La FCFI se fundó en la Expo de la Asociación Americana de la Soya en 1985. Desde entonces, la organización ha apoyado el evangelismo, la ayuda en desastres y el alcance misionero para las comunidades agrícolas en todo Estados Unidos.
Cada año, los voluntarios representan a la FCFI en 25 convenciones de los Futuros Agricultores de América (FFA, por sus siglas en inglés) y en numerosas ferias agrícolas. Un “Bastón del Evangelio sin Palabras” se utiliza como herramienta de evangelización, con un código QR y cuentas de colores que representan las verdades de la historia del evangelio para usar como puntos de conversación sobre Dios al dialogar con otros agricultores.
Los equipos de la FCFI también se han movilizado para ayudar a comunidades en EE. UU. que han sido afectadas por tornados, inundaciones, incendios forestales y huracanes, entregando heno, reparando casas, reconstruyendo cercas y ofreciendo aliento del evangelio durante tiempos difíciles.
La organización también ha estado activa en el extranjero con viajes misioneros internacionales de corta duración, ayudando a construir iglesias, capacitar pastores y apoyar a familias de refugiados, incluyendo un “ministerio de corazón” en Rumania y una red clandestina que ayuda a niños ucranianos.
Artículo publicado originalmente en Christian Daily International, versión en inglés de Diario Cristiano Internacional.