
Durante la semana pasada, la congresista peruana, Milagros Jáuregui de Aguayo, presentó un proyecto de ley por el cual se podría eliminar el término de delito de “femicidio” y sancionar el asesinato de “cónyuges” o “convivientes” bajo el principio de igualdad ante la ley.
Según Jáuregui, —quien junto a su esposo son pastores y llevan más de 30 años trabajando en la unión de las familias—, el objetivo es evitar la discriminación por sexo y garantizar un tratamiento equitativo en la legislación penal. El proyecto propone modificar la redacción actual del artículo que define el feminicidio como "el que mata a una mujer por su condición de tal", por "el que mata a su cónyuge o su conviviente”. De ser aprobado, el nuevo delito de "asesinato de la pareja" incluiría contextos como violencia familiar, coacción sexual, abuso de poder y cualquier forma de discriminación.
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“El delito de feminicidio sanciona con hasta cadena perpetua al hombre que asesina a su pareja. Sin embargo, este mismo delito no recibe la misma pena cuando la víctima es un hombre. Lo que busca la propuesta es resestablecer la igualdad de sanciones por el mismo delito cometido. Por ello hemos mantenido los contextos, agravantes y penas del tipo penal de feminicidio”, indicó Jáuregui según informó el portal del Congreso de la República.
De aprobarse la propuesta la pena “será aplicable tanto a los hombres como a las mujeres, basados en el principio constitucional de igualdad ante la ley y no discriminación”, sentenció.
Al día siguiente tuvo lugar en el Congreso de la República el foro “Batalla Cultural: cómo enfrentar el avance del globalismo y rescatar los valores tradicionales” donde supuestamente Jáuregui trató de “animales” a las personas que se identifican “no binarias”. Las palabras fueron tomadas “fuera de contexto” y “manipuladas” por sectores progresistas, según informaron desde la oficina de la congresista y así también lo sostuvieron desde el partido en el que actúa la pastora.
Frente al discurso y ante el accionar de la parlamentaria en la propuesta de leyes como la antes mencionada, una colega, la congresista Susel Pareces presentó una denuncia acusando a Jáuregui de infracción a la Constitución y del delito de discriminación. Fue la misma Paredes quien anunció desde sus redes sociales que había presentado “una Denuncia Constitucional contra Milagros Jáuregui de Aguayo, por infracción a la Constitución y el delito de discriminación, ya que sostuvo que las personas LGBTQ+ ‘se portan como un animal’”. Además calificó como “discursos de odio” a lo dichos de Jáuregui que aprovechó para decir que “son inaceptables, peor aún desde una autoridad” para descalificarla.
Las palabras de la congresista fueron tomadas “fuera de contexto” y “manipuladas” por sectores progresistas.
En la controversia por los dichos de Jáuregui se menciona que ésta cuestionó las relaciones entre personas del mismo sexo, calificándolas como carentes de “amor verdadero” y que las mismas responden a la “lujuria y lascivia”. Lo que desató la furia LGTBQ+, de sus organizaciones y sus representantes como Susel Paredes, quien es trans. Quienes aseguran que “este tipo de declaraciones no solo revelan un desconocimiento sobre los derechos humanos y la diversidad, sino que también fomentan el odio y la intolerancia”, como contó en una nota Infobae.
Una de las comunidades de fe más progresista en todo Latinoamérica como lo es la Iglesia Luterana del Perú, salió al cruce de la defensa propinada por el partido de Jáuregui y señalaron que rechazan “rotundamente” las declaraciones de la congresista Milagros Jáuregui de Aguayo “quien no solo ignora las relaciones de amor entre personas del mismo sexo”, sino que “abusa de su posición congresal” para “mentir descaradamente” y “buscar aprobación de sectores antiderechos, aprovechando la LGBTIfobia existente”, según dicen en su cuenta de Facebook.
Además sostuvieron que “la posición dogmática de la señora Aguayo no representa al cristianismo; existimos muchas denominaciones cristianas entre luteranxs, metodistas y comunidades libres que valoramos las vidas LGBT+ como una bendición de la Divinidad a nuestras comunidades”.
Por su parte el Congreso Iberoamericano por la vida y la familia emitió un comunicado en el que se "se solidariza" con Jáuregui y donde afirma que la congresista y pastora “lleva a cabo una intensa y formidable gestión legislativa en defensa de la vida y la familia en el Perú dejando un ejemplo para las naciones del continente de congruencia y de un irrestricto apego al Estado de Derecho”.
El documento sostiene que este ataque es producto de los valores “tradicionales” que “desafían el estatus quo de los grupos autodenominados progresistas que violentan el derecho para insistir en ‘nuevos derechos’”. Además de atentar contra “el Estado de derecho y la convencionalidad de los Tratados Internacionales”.
"El Congreso Iberoamericano reconoce y respalda el extraordinario trabajo legislativo de la congresista; la intensa labor social de la ciudadana; y la incansable tarea ministerial de la pastora, Milagros Jáuregui de Aguayo que deja un gran legado para nuestro amado Perú y las nacionales del Continente", concluye el escrito que lleva la firma de su presidente el Lic. Aarón Lara Sánchez, del Consejo Consultivo y de los coordinadores nacionales que conforman la entidad mencionada.