
Líderes cristianos en Jamaica están expresando una fuerte oposición a una campaña para derogar la Ley Obeah de la nación, advirtiendo que legalizar esta práctica espiritual popular abriría la puerta a la “confusión” y a fuerzas demoníacas.
El rechazo surge a raíz de los esfuerzos de la Fundación Unuchi, una organización sin fines de lucro espiritualista africana, que ha estado abogando por la despenalización del obeah y organizó vigilias el pasado martes por la noche antes de una audiencia constitucional. La fundación afirma que su misión es empoderar y sanar a las personas de ascendencia africana a través de las tradiciones de conocimiento africano, incluido el obeah.
El obeah, un conjunto de prácticas espirituales afrocaribeñas que mezclan tradiciones africanas con elementos cristianos y populares, se ha utilizado históricamente para la curación, la protección y la adivinación, pero también se asocia con rituales que, según algunos críticos, se utilizan para dañar a otros o proteger la actividad criminal. Los líderes de la iglesia que se oponen a su legalización en Jamaica advierten que tales prácticas podrían fomentar la violencia, empoderar a elementos criminales e invitar a lo que describen como influencia demoníaca.
El obispo Dr. Alvin Bailey, presidente de la Alianza Evangélica de Jamaica y director de proyectos de los Grupos Paraguas de Iglesias de Jamaica, dijo al Jamaica Observer que la práctica ya está dañando a la sociedad jamaicana a pesar de ser ilegal.
“Sería la peor y más desastrosa decisión que este país podría tomar si deciden legalizar el obeah”, dijo Bailey. “Creemos que los diablos y los demonios están detrás de muchos de estos comportamientos, y es por eso que se ha estado escuchando que hombres en posiciones de autoridad están fuera de control y piden intervención divina”.
Bailey advirtió que la despenalización envalentonaría a los practicantes y aumentaría el daño social. “Legalizar el obeah es crear un tipo de confusión sin precedentes”, dijo, y agregó que los pastores ven como su responsabilidad resistir esta medida.
Describió la práctica como generalizada, diciendo que la gente en cualquier parroquia puede encontrar un practicante de obeah en el vecindario y que los hechizos que lanzan han “destruido la vida de las personas de muchas maneras”. Bailey dijo que los líderes de la iglesia están orando activamente contra estas fuerzas, creyendo que están detrás de actos de violencia y desviación.
Otros pastores se hicieron eco de las preocupaciones de Bailey. El obispo Rowan Edwards de Lighthouse Assembly Ministries le dijo al Observer que la iglesia debe tomar una posición firme para evitar que Jamaica siga a Haití, donde el vudú es legalmente reconocido. El pastor Dalbert Simmonds de la Fraternidad de Ministros de Spanish Town dijo que el obeah sigue siendo una influencia peligrosa, citando testimonios de que algunos grupos criminales usan rituales para proteger a los pistoleros y justificar la violencia.
La Ley Obeah de Jamaica, promulgada en 1898, tipifica como ilegal reclamar poderes sobrenaturales o usar instrumentos de obeah, con sanciones que incluyen multas o encarcelamiento.
Artículo publicado originalmente en Christian Daily International, versión en inglés de Diario Cristiano Internacional.