La hija de un destacado pastor chino, quien recientemente fue atrapado en la represión del Partido Comunista Chino (PCCh) contra la iglesia clandestina, instó a los cristianos a no olvidar a sus hermanos y hermanas perseguidos en China.
"Sabemos que somos parte de una comunidad cristiana global, y por eso pedimos oración y pedimos que no nos olviden y que no olviden a los cristianos en China", dijo Grace Jin Drexel durante una entrevista transmitida en el programa "Fox News Sunday" recientemente.
Ciudadana estadounidense cuyo padre, el pastor Ezra Jin Mingri, fue detenido en su casa en Beihai, provincia de Guangxi, el 10 de octubre, Drexel dijo que su padre fue acusado de difundir ilegalmente información en línea, pero sugirió que el cargo es fabricado y tiene motivaciones políticas.
Dijo que su padre se encuentra ahora recluido en un centro de detención en la ciudad, y una copia de la notificación de detención de Jin obtenida por la BBC señala que está recluido en la prisión Número Dos de Beihai bajo sospecha de "uso ilegal de redes de información".
"Pero ese es solo un cargo muy político que simplemente usarían para la persecución", dijo Drexel, quien trabaja como miembro del personal del Senado de los EE.UU. en Washington, D.C.
El padre de Drexel, quien protestó durante las manifestaciones de la Plaza de Tiananmen en 1989, ayudó a fundar la Iglesia Sion, una congregación evangélica no denominacional que surgió en 2007 y ha crecido hasta convertirse en una de las iglesias caseras no registradas más grandes de China.
La iglesia fue clausurada oficialmente por las autoridades en 2018, pero ha seguido creciendo en múltiples ciudades chinas, con muchos participando en línea.
Hasta 10.000 personas participan en los servicios en Zoom, YouTube y WeChat, entre otras plataformas, según The Wall Street Journal.
Casi al mismo tiempo del arresto de Jin a principios de este mes, aproximadamente otros 30 líderes y miembros de la Iglesia Sion fueron arrestados o reportados como desaparecidos en varias ciudades, incluidas Beijing, Shanghái y Shenzhen, según The New York Times.
El yerno de Jin y esposo de Grace, Bill Drexel, quien es investigador en el Instituto Hudson, dijo a Fox News que la represión contra los miembros de la Iglesia Sion parece ser "la represión individual más extensa contra cualquier iglesia en China en los últimos 40 años".
"Así que lo que estamos viendo es una grave escalada en varias ciudades; es realmente a nivel nacional, y esto parece ser solo el comienzo", añadió.
Bill Drexel, parte de cuyo trabajo se centra en la competencia de inteligencia artificial con China, continuó señalando que el PCCh posiblemente anticipa un tiempo geopolítico difícil por delante, lo que, según él, podría estar incitándolos a reprimir a su población.
"Tienden a querer reforzar el control sobre su sociedad", dijo sobre cuando las autoridades chinas perciben problemas en el horizonte. "Quieren apretar las tuercas para tener un control absoluto en caso de que teman que haya malestar público".
Aunque Grace Jin Drexel dijo que mantiene la esperanza de una liberación milagrosa para su padre, reconoció que él y los demás probablemente enfrentan una difícil batalla legal por delante.
"Definitivamente, como cristiana, también creo en los milagros, y estamos pidiendo la liberación total, incondicional e inmediata de mi familia, así como de los otros 21 que están detenidos", dijo.
"Lamentablemente, al observar otros casos en China, de otros cristianos perseguidos, realmente sería un milagro si pudieran ser liberados de una manera tan rápida e incondicional", continuó. "Así que nos estamos preparando para una posible batalla legal más larga, pero eso es lo que parece [...] que sucederá".
El caso de Jin y el de los demás detenidos han llamado la atención de los Estados Unidos y de la administración Trump, y el Secretario de Estado, Marco Rubio emitió una declaración el 12 de octubre condenando los arrestos de Jin y otros, exigiendo su liberación e instando a las autoridades chinas a permitir que todas las personas de fe, incluidas las de las iglesias caseras, practiquen su culto libremente.
"Esta represión demuestra aún más cómo el PCCh ejerce hostilidad hacia los cristianos que rechazan la interferencia del Partido en su fe y eligen practicar su culto en iglesias caseras no registradas", dijo Rubio.
"Hacemos un llamado al PCCh para que libere de inmediato a los líderes de la iglesia detenidos y para que permita a todas las personas de fe, incluidos los miembros de las iglesias caseras, participar en actividades religiosas sin temor a represalias".
El Ministro de Relaciones Exteriores de China, Lin Jian, rechazó la condena de los EE.UU., afirmando que no estaba al tanto de los arrestos y oponiéndose a "la interferencia de la parte estadounidense en los asuntos internos de China bajo el pretexto de los llamados asuntos religiosos", según NPR.
