En respuesta a la creciente preocupación dentro del sector religioso sobre el futuro de la radiodifusión y televisión confesional, el Gobierno de la República de Costa Rica estableció un compromiso firme este fin de semana: no se cerrarán medios de comunicación cristianos y se garantizará el espacio en el espectro radioeléctrico para la difusión de valores judeocristianos.
El acuerdo surge tras una reunión de alto nivel celebrada este viernes en Casa Presidencial, encabezada por el mandatario Rodrigo Chaves Robles, la ministra del Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT), Paula Bogantes Zamora, y representantes clave del liderazgo evangélico y católico del país.
La cumbre se llevó a cabo en un momento de tensión, luego de que diversos actores políticos y religiosos expresaran su alarma por las implicaciones de la reciente subasta de frecuencias y el marco jurídico actual.
Recientemente, tal como informó Diario Cristiano Internacional, el diputado y líder cristiano Fabricio Alvarado había emitido una alerta pública sobre el posible cierre de medios cristianos, advirtiendo que las nuevas condiciones podrían silenciar voces fundamentales para la fe en la nación.
Ante este panorama, el comunicado oficial CP-051-2025, emitido este sábado 29 de noviembre, confirma que hubo una "discusión muy constructiva" respecto a las inquietudes de los participantes sobre la subasta de frecuencias.
El presidente Chaves fue categórico en su postura, buscando disipar los temores levantados en las últimas semanas: "El Gobierno no tiene la intención de cerrar ninguna televisora o radioemisora", indicó el mandatario, según cita el documento oficial.
Un pacto por los valores judeocristianos
Más allá de la promesa de no cierre, lo más trascendental para la comunidad cristiana es el establecimiento de un proceso de trabajo conjunto entre el Poder Ejecutivo y los grupos religiosos.
El objetivo de esta alianza es blindar la misión evangelística en los medios. El Gobierno se comprometió a garantizar "que las frecuencias del país estén disponibles para predicar la palabra de Dios y promover valores judeocristianos".
Este reconocimiento explícito de la función social y espiritual de los medios cristianos marca un precedente importante en la relación Iglesia-Estado en Costa Rica.
Durante la sesión, la ministra Paula Bogantes presentó en detalle las obligaciones legales y los derechos que poseen los involucrados en el sistema de radiodifusión y televisión abierta, aclarando el panorama técnico que había generado dudas.
Preocupación por la Sala Constitucional
A pesar del buen ambiente con el Ejecutivo, el comunicado revela que persiste una inquietud significativa respecto al Poder Judicial. Los líderes religiosos expresaron su preocupación "por la acción de la Sala Constitucional en esta materia y la incertidumbre que resulta de la misma".
Este punto sugiere que, aunque la voluntad política del gobierno de Chaves es favorable a la libertad de los medios religiosos, aún existen batallas legales en el ámbito constitucional que el sector deberá monitorear de cerca para asegurar su permanencia al aire a largo plazo.
Unidad del cuerpo de Cristo
El encuentro destacó por la unidad mostrada entre las distintas denominaciones. El presidente agradeció la presencia de "todo el sector evangélico", así como la participación de Radio Chorotega de Tilarán, medio católico que se unió a este esfuerzo conjunto en defensa de la libertad religiosa en los medios de comunicación.
Este acercamiento entre el Gobierno y el liderazgo cristiano representa un alivio para miles de creyentes que dependen de estos medios para su edificación espiritual y confirma que, por el momento, la voz de la Iglesia seguirá sonando con fuerza en el espectro radioeléctrico costarricense.
