
MIAMI, FL – En un mundo mediático cada vez más fragmentado, donde la atención de las audiencias se divide entre la televisión tradicional, las redes sociales y un sinfín de plataformas de streaming, un panel de reconocidos comunicadores se reunió en el Media Music Marketing Summit para debatir sobre un desafío crucial: cómo unificar a la comunidad y llevar un mensaje de impacto "del Prime Time al Timeline y viceversa".
La conversación, moderada por Rochy Cantillo, reveló que, más allá de la tecnología, la clave reside en un profundo sentido de propósito y ministerio.
El panel contó con la participación de Tayhana García, periodista de Univision 23 ganadora de 13 premios Emmy; el Padre Alberto Cutié, una de las figuras más reconocidas de la radio y televisión hispana; Ray Cruz, director de contenido de La Poderosa 990 AM; y Melvin Rivera, pionero del podcasting en español. Juntos, compartieron sus experiencias transitando desde los medios masivos a los nichos digitales, coincidiendo en que cada pantalla es una oportunidad para servir.
El periodismo como labor social y ministerio
Tayhana García abrió la conversación enfatizando su visión del periodismo como un llamado al servicio. "Para mí, el periodismo es una labor social", afirmó. Relató cómo, a través de sus reportajes de investigación, ha logrado cambios concretos, como la creación de nuevas leyes para proteger a los residentes de asociaciones de propietarios corruptas o la resolución de problemas comunitarios urgentes.
García contó la historia de un edificio de personas mayores que llevaban meses sin aire acondicionado en el intenso calor de Miami. "Ellos me llaman y, pues, de inmediato me comunico con la alcaldía, me comunico con la ciudad... y ese mismo día esa gente tenía aire acondicionado".
Para García, ser una profesional cristiana en un medio secular no es una contradicción, sino una misión. Ante las preguntas de por qué trabaja en las noticias seculares, su respuesta es firme: "Ese es mi ministerio. Dios me puso allí para dar las buenas nuevas en momentos de dificultad. Cuando una mujer pierde a su marido, cuando una madre pierde a sus hijos, allí estoy yo para orar con ellos".
De la televisión como "cruz" al ministerio masivo

El Padre Alberto Cutié, conocido por millones como el "Padre Oprah", compartió un testimonio sorprendente sobre sus inicios. “Yo nunca quise estar en televisión”, confesó, explicando que fueron sus superiores quienes lo enviaron a un casting en Telemundo. Al principio, vio la oportunidad como una carga que lo alejaba de su trabajo parroquial. “Para mí era una cruz, era pesadísimo irme de lo que a mí me apasionaba a meterme en un estudio oscuro”.
El cambio de perspectiva llegó en un semáforo en la ciudad de Hialeah, justo antes de grabar su primer programa en vivo. En una oración sincera, le dijo a Dios: “Señor, tú me has metido en este rollo. Si tú quieres esto, yo lo hago. Si tú no lo quieres, yo lo quiero menos”.
A partir de ese momento, entendió su propósito. Comenzó a recibir cartas de personas en toda América Latina que regresaban a la iglesia y a la fe gracias a su programa. "Me di cuenta de que Dios me había puesto ahí", concluyó, afirmando que incluso los escándalos mediáticos que enfrentó sirvieron para acercar a muchas personas a Dios.
La evangelización secular y la reinvención en la radio
Ray Cruz, de la emisora La Poderosa 990 AM, abordó el conflicto interno que a menudo sienten los creyentes que trabajan en medios seculares. Relató un momento en que estuvo “a punto de soltar los guantes”, sintiendo la presión de la religiosidad frente a su labor.
Sin embargo, una palabra de Dios cambió su enfoque: “El Señor me dijo: ‘No te avergüences de lo que yo formé, porque tu carácter lo formé yo’”. Esto lo llevó a abrazar lo que él llama "la evangelización secular".
Cruz explicó que, mientras la radio tradicional se aferraba a formatos antiguos, él y su equipo apostaron por lo digital, creando una sinergia indispensable. Para él, la fórmula del éxito en el panorama actual es una combinación de ambos mundos. Concluyó que "las redes sociales te dan presencia, el medio tradicional te da credibilidad, pero separados no pueden trabajar, tienen que estar juntos".
El podcasting y la herramienta clave del futuro
Melvin Rivera, considerado un "gurú" del podcasting, ofreció una perspectiva centrada en la audiencia. Afirmó que lo más importante no es la plataforma, sino entender qué necesita el público. "La herramienta más importante... es lo que el público que tú quieres alcanzar necesita y utiliza", aconsejó.
Cuando se le preguntó por las herramientas esenciales para los creadores de hoy, Rivera sorprendió al panel. Más allá de micrófonos o software de edición, señaló una tecnología como la más importante para producir contenido actualmente: "la inteligencia artificial".
Rivera explicó que, si bien tiene sus limitaciones y riesgos, la IA bien utilizada puede transformar la manera en que se investiga, se crea y se distribuye contenido, convirtiéndose en un "ayudante" invaluable para el comunicador.
Un llamado a no ceder el poder creativo
El sentimiento unánime del panel fue que, independientemente de la plataforma, el propósito del comunicador cristiano es llevar un mensaje que edifique, transforme y sirva. La discusión cerró con una poderosa reflexión de Ray Cruz, quien instó a los creadores a reclamar su espacio en todas las áreas del arte y la comunicación.
“Dejémosle de dar el poder creativo al diablo. Todas las artes las hizo Dios, el diablo se ha apoderado de ellas, pero nosotros tenemos que utilizarlo”, sentenció.
Este llamado a la acción resonó como el tema central del encuentro: la misión de hoy está en todas las pantallas, y es responsabilidad de los creyentes conquistarlas con excelencia, creatividad y un inquebrantable sentido de llamado.