TD Jakes, fundador de la megaiglesia The Potter’s House [La Casa del Alfarero] en Dallas, Texas, sufrió un desvanecimiento y una emergencia médica mientras predicaba a finales de noviembre de 2024, lo que derivó en una intervención quirúrgica delicada e importante.
En un mensaje en video publicado en diciembre, dirigido a su congregación, no reveló la naturaleza exacta de su condición ni de la cirugía, pero compartió detalles sobre la gravedad de la situación, diciendo: “Alabado sea Dios que no estamos planeando un funeral”.
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Jakes, de 67 años, salió al escenario el último domingo de diciembre de 2024, recibiendo una ovación tras haberse descompensado en ese mismo lugar semanas atrás. El obispo agradeció a la congregación por sus oraciones y al equipo médico que lo atendió. “Para ser perfectamente honesto... voy a ser muy transparente. Tenía una gran ansiedad por caminar en este escenario, parado en el mismo lugar en el que casi muero”, dijo Jakes, según The Christian Post.
Inicialmente, Jakes se mostró reticente a divulgar demasiados detalles sobre el incidente que lo llevó a someterse a varias horas de cirugía en el Hospital Metodista del Sur. Sin embargo, compartió lo suficiente para transmitir que los médicos le dijeron que, de haber esperado cinco minutos más para recibir atención médica, habría muerto.
“Quiero que sepan que estuvieron orando todo el tiempo mientras me operaban, y Dios me llevó a salvo a través de ello. Pasé varias horas en cirugía. Casi me perdieron dos veces, pero cada vez que mis signos vitales caían, sus oraciones prevalecían, y hoy estoy aquí de pie por la gloria de Dios”.
Además, Jakes utilizó su reciente experiencia como un mensaje de esperanza para los cristianos congregados el domingo. “No sé por lo que estás pasando... pero deja que esto sea una señal de que estás en camino a un regreso”, señaló en medio de su predicación. El pastor añadió: “...si estoy hablando directamente contigo, y si todas las probabilidades han estado en tu contra, y si apenas podían tomarte el pulso, y si apenas podías reconocer a alguien, y todos decían que no lo lograrías, yo estoy aquí como un testimonio... Yo no vengo como obispo Jakes; vengo como obispo Lázaro para hacerte saber que con Dios, todas las cosas son posibles”, puntualizó.
Jakes, luego del incidente, publicó un mensaje en la red social X que dice: “Mi tarea es recuperarme y reflexionar sobre la protección de Dios. Se lo debo a mi increíble familia y a los miembros de mi iglesia, descansar y reflexionar mientras Él me restaura para Su servicio”.
