
En el corazón de la selva peruana, la Clínica Ana Stahl celebra 99 años de servicio ininterrumpido a la salud y al bienestar de las comunidades amazónicas. En el marco de su aniversario, la institución fortaleció su compromiso social con una donación significativa al Hospital Regional de Loreto “Felipe Santiago Arriola Iglesias”, reafirmando su vocación de casi un siglo al servicio de la vida.
La entrega, realizada junto a la Asociación Educativa y de Beneficencia Misión Adventista del Séptimo Día del Nor Oriente del Perú, consistió en 30 camas clínicas eléctricas destinadas a tres salas de hospitalización y al área de ginecología del hospital. La primera entrega se efectuó en abril, con 12 camas, y la segunda en octubre, con 18 adicionales. Este equipamiento moderno permite mayor comodidad para los pacientes y optimiza la labor del personal de salud.
La doctora Eliana Berríos, directora general de la Clínica Ana Stahl, destacó que esta acción “reafirma nuestro compromiso de servicio, de brindar mayor comodidad a los pobladores y facilitar la labor del personal médico de la región loretana”. La ceremonia de entrega reunió a representantes de ambas instituciones, al equipo del hospital y a autoridades locales, quienes subrayaron la importancia de este tipo de colaboraciones para mejorar la atención médica en la Amazonía.
Desde su fundación en 1926, la Clínica Ana Stahl se ha consolidado como un pilar de la salud en Loreto. Nació con la misión de llevar atención médica integral a zonas de difícil acceso, y a lo largo de casi un siglo ha extendido su servicio más allá de la atención clínica: campañas médicas fluviales, programas comunitarios y formación de profesionales comprometidos con la salud pública son parte de su legado.
En una región marcada por grandes distancias y escasos recursos sanitarios, la presencia constante de la clínica representa mucho más que infraestructura: es símbolo de esperanza, continuidad y fe en el valor de la vida. Las 99 décadas de labor son testimonio de una institución que ha superado epidemias, limitaciones logísticas y desafíos económicos sin apartarse de su propósito esencial: cuidar a las personas con calidad, respeto y dignidad.
Mientras se aproxima su centenario, la Clínica Ana Stahl proyecta nuevas alianzas y mejoras en equipamiento para seguir ofreciendo atención médica de primer nivel. En Loreto, cada gesto solidario —como esta donación— refleja una historia que une pasado y futuro: casi cien años de servicio, entrega y amor por la salud en la selva peruana.





