El expresidente y aspirante a la nominación presidencial republicana Donald Trump ha sido declarado culpable de los 34 cargos que le imputa un jurado de Nueva York en el caso del "dinero oculto".
Un jurado de 12 miembros declaró a Trump culpable de todos los cargos el jueves por la tarde, lo que le convierte en el primer presidente de la historia moderna en ser condenado por un delito.
Los cargos de delito grave estaban relacionados con la falsificación de registros comerciales derivados de una acusación de que Trump pagó a la estrella porno Stormy Daniels (de nombre real Stephanie Clifford) 130.000 dólares en 2016 para ocultar un supuesto encuentro sexual ocurrido años antes, mientras él se presentaba entonces como candidato a la presidencia.
El jurado concluyó que Trump autorizó el plan para falsificar cheques y otros registros relacionados para evitar que los votantes se enteraran del supuesto encuentro sexual con Daniels allá por 2006.
Los fiscales argumentaron que la conspiración había abarcado tanto su campaña de 2016 como su primer año como presidente. Trump ha negado haber mantenido relaciones sexuales con Daniels y todos los cargos del caso.
En el pasado, Trump ha atacado al fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, por dirigir la investigación en su contra, calificándolo de "fiscal de distrito local fracasado" y afirmando que "filtró ilegalmente cantidades masivas de información del gran jurado, por lo que debería ser procesado o, como mínimo, debería dimitir".
En marzo, antes de que comenzara el juicio, el tribunal aceptó la moción de los fiscales para limitar la capacidad de Trump de hacer declaraciones sobre el caso fuera del proceso, concretamente en redes sociales.
El juez de Nueva York Juan M. Merchan declaró a Trump culpable de violar esta orden de silencio en abril en nueve ocasiones a través de publicaciones en su plataforma de redes sociales, Truth Social, y en la página web de su campaña presidencial.
Merchan escribió que aunque era "muy consciente y protector" de la libertad de palabra y expresión de Trump, advirtió que el tribunal no aceptará "violaciones intencionadas de sus órdenes legales y que, si es necesario y apropiado dadas las circunstancias, impondrá un castigo privativo de libertad".
Trump y sus partidarios han negado durante mucho tiempo la validez del juicio y sus procedimientos, alegando que todo el asunto era un ataque motivado políticamente contra el candidato republicano.
Desde que abandonó la Casa Blanca en enero de 2021, Trump se ha enfrentado a numerosos cargos penales en múltiples tribunales, que incluyen sus presuntos esfuerzos por anular los resultados de las elecciones de 2020.
Publicado originalmente en The Christian Post.