
Miles de cristianos se congregaron en la ciudad de El Alto, una de las urbes más jóvenes y dinámicas de Bolivia, para participar en una multitudinaria jornada de oración con motivo de los 40 años de fundación de la ciudad. El evento reunió a fieles de diversas denominaciones en un acto que destacó por su espíritu de unidad y fe, informó El Diario.
La jornada fue organizada por el Consejo Nacional Cristiano de Bolivia (CONCIPO) y contó con la participación de reconocidos líderes religiosos, quienes elevaron plegarias por la paz, la prosperidad y el bienestar de la ciudad y sus habitantes.
Durante el evento, el pastor Luis Aruquipa, uno de los líderes principales, destacó la importancia de la unidad en tiempos difíciles: "Queremos que El Alto sea bendecido y que la paz de Dios reine en cada hogar. Estamos aquí para interceder por nuestra ciudad y nuestro país".
El acto de oración también contó con la presencia de pastores de distintas iglesias evangélicas, quienes hicieron un llamado a fortalecer la fe y mantener la esperanza en medio de los desafíos que enfrenta la comunidad. Los participantes entonaron cánticos de alabanza y compartieron mensajes bíblicos que motivaron a los asistentes a mantenerse firmes en su fe.
En el transcurso de la jornada, varios pastores expresaron su gratitud por la participación masiva de creyentes, destacando la relevancia de estos actos para promover la unidad espiritual. "Es un honor ver a tantos hermanos reunidos para clamar juntos por El Alto. La oración tiene poder y creemos que Dios escuchará nuestro clamor", señaló el pastor Jorge Choque, otro de los líderes presentes.
El evento concluyó con una oración colectiva en la que los asistentes pidieron por la paz y la estabilidad de Bolivia, así como por el bienestar de las familias alteñas. Los organizadores manifestaron su satisfacción por la convocatoria y destacaron el compromiso de seguir promoviendo actividades similares en el futuro.
La jornada de oración se llevó a cabo en un ambiente de respeto y fraternidad, reflejando el compromiso de las iglesias cristianas y evangélicas con la ciudad de El Alto y su gente. La comunidad expresó su anhelo de que este tipo de eventos continúen fortaleciendo la fe y la esperanza de los ciudadanos.
Este acto de fe marcó un hito en la historia de la ciudad, resaltando el poder de la unidad cristiana en la celebración de un aniversario tan significativo para El Alto, que ha crecido rápidamente desde su fundación y se ha convertido en una importante urbe boliviana.