En una jornada de evangelización que recorrió las calles de Lajeado, un hombre sordo —que dependía de audífonos para escuchar— recuperó la audición al ser orado por un grupo de misioneros de la organización Aviva, y decidió entregar su vida a Jesús.
Según el fundador de Aviva, Lucas Teodoro, más de 100 voluntarios —según lo informado a través de Radio TV SOS da Vida— salieron a las calles el miércoles 16 de julio para predicar el Evangelio. Allí identificaron al hombre, le hablaron de Dios, y luego, al orar, le pidieron que se quitara los audífonos. Este volvió a escuchar con normalidad, según contaron: “respondió todos los tests de capacidad auditiva”.
El impacto fue inmediato: “Él entregó su vida para Jesús”, afirmó Teodoro. El episodio fue registrado en redes sociales por la organización, que celebró la intervención divina como señal de que “el mismo Dios que operaba milagros continúa actuando hoy” .
Fe reforzada en la “Aviva Conference”
El mismo milagro se repitió durante la “Aviva Conference”, evento realizado los días 16 y 17 de julio en la Iglesia Bautista de Lagoinha en Lajeado. Allí, otro hombre que escuchaba con un solo oído recuperó totalmente la audición tras la oración de los misioneros.
El testimonio recogido en el altar fue conmovedor: tras la oración en una sala privada, el hombre dejó sus audífonos sobre el altar y afirmó con voz firme: “Jesús vive. Cristo vive” .
Además de estas sanaciones auditivas, los voluntarios compartieron otros testimonios, como el de un hermano que sufrió una fractura en la muñeca tras caerse en moto. Aunque el alivio no fue completo de inmediato, sí notó gran mejoría: “no podía mover los dedos y ahora sí”, relató ().
Próxima cruzada en el Parque dos Dick
Los organizadores anunciaron que la misión continua los días 18 y 19 de julio con una cruzada evangelística en el Parque dos Dick, abierta a toda la ciudad. “Dios está uniendo el cuerpo, encendiendo corazones y preparando algo grande para esta ciudad. Una ciudad, varias iglesias, un solo propósito”, afirmaron.
La evangelización callejera en Lajeado experimentó momentos excepcionales: varios hombres fueron sanados de sordera, uno recuperó la movilidad de una muñeca, y varios entregaron su vida a Cristo. Una señal clara, según los creyentes, de que los milagros continúan presentes en la sociedad y la fe se manifiesta en el poder de la oración y la unión de hermanos.
