El informe Estado de la Biblia 2025, publicado por la Sociedad Bíblica Americana (ABS), reveló que 11 millones de estadounidenses más están leyendo la Biblia este año en comparación con 2024, representando el primer aumento desde la pandemia. El crecimiento ha sido más fuerte entre hombres, millennials y la Generación X, sorprendiendo incluso a los investigadores.
“Estábamos increíblemente animados... Aún no es una tendencia, pero es un paso significativo en la dirección correcta”, expresó John Plake, director de innovación de ABS, durante una entrevista con Christian Daily International.
El estudio, que encuestó a más de 9,500 adultos, muestra que el número de “usuarios de la Biblia” (quienes la leen fuera del culto al menos tres o cuatro veces al año) ha subido del 38% en 2024 al 41% en 2025. Especialmente notorio fue el aumento del 30% entre los millennials y del 21% entre los hombres. Incluso en regiones tradicionalmente seculares como el Noreste de EE.UU. y el Área de la Bahía de San Francisco, el uso bíblico aumentó de forma estadísticamente significativa.
“Esto nos dice que algo se está moviendo, particularmente entre los hombres jóvenes adultos... y no es precisamente lo que esperábamos ver”, agregó Plake.
El informe también identificó un grupo de 71 millones de estadounidenses denominado el “medio movible”: personas curiosas sobre la Biblia pero con dudas o sin guía espiritual. Cerca de la mitad de los cristianos no practicantes dicen estar abiertos a volver a comprometerse con las Escrituras.
Plake afirma que muchos de ellos no han rechazado la fe, sino la manera en que se les presentó. “Se les han enseñado historias bíblicas como cuentos morales, pero han perdido la gran narrativa que apunta a Jesús”, comentó.
Además de los datos nacionales, el informe incluye un análisis comparativo con 85 países gracias al Estudio de Compromiso con la Biblia Mundial PATMOS, realizado junto con la Sociedad Bíblica Británica y Gallup. Según Plake, este enfoque global permite ver cómo EE.UU. se posiciona dentro de una dinámica espiritual más amplia.
Con nuevos capítulos del informe en camino —incluyendo temas como salud mental, trauma y fe pública— la ABS espera que estas cifras sirvan como una herramienta de aliento y estrategia para iglesias y ministerios.
“Si te importa la Biblia, ahora es el momento de hablar... Muchos están abiertos, incluso si no están en un banco el domingo”, concluyó Plake.
