El corredor estadounidense, de 27 años, Noah Lyles está alabando a Dios después de que se asegurara el título de "hombre más rápido del mundo" al ganar medalla de oro en la final masculina de 100 metros en los Juegos Olímpicos de París, por sólo 5 milésimas de segundos. En una entrevista posterior a su victoria, BBC Sport le preguntó cuál fue su último pensamiento antes de la carrera. El atleta sonrió y dijo: “¡Gracias, Dios!”
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"Dios, si realmente quieres que haga esto, dame una señal. Me dio una señal y dije, no volveré a dudar de ti”, confesó a los medios tras confirmarse que fue el ganador de los 100 metros planos.
El final de la carrera fue tan reñido que se necesitó un photo finish para resolver la incógnita. El jamaiquino Kishane Thompson, se llevó una amarga sorpresa al ver los resultados. Thompson terminó con un tiempo de 9.79 segundos (9.79,789), pero fue apenas cinco milésimas más lento que Lyles, también con 9.79 segundos (9.79,784). Por supuesto que Lyles hubiera dado la gloria a Dios con la medalla de plata, pero hizo la hazaña y las comparaciones con Usain Bolt no tardaron en llegar.
Durante ocho años, de 2008 a 2016, el jamaiquino Bolt fue el hombre más rápido del mundo y, de hecho, las dos plusmarcas mundiales de los 100 y 200 metros aún las conserva él con 9,58 y 19,19, respectivamente.
"Dios, si realmente quieres que haga esto, dame una señal. Me dio una señal y dije que no volveré a dudar de ti” -Noah Lyles.
"Dios mio, soy el elegido... Parece que este momento estaba destinado para mi y que yo iba a ser el elegido", declaró Lyles, al término de la carrera de 100 metros.
“Tenía que encontrar mi propio viaje con Dios y mucho de eso llegó a través de la pista porque hubo muchas veces en las que pensé 'no sé si puedo hacer esto'”, destacó en otra entrevista a Premier Christian Radio.
Lyles ha sido abierto sobre las luchas de la vida a las que se enfrenta y que casi frustran sus sueños olímpicos. "Tengo asma, alergias, dislexia, TDA, ansiedad y depresión. Pero, te diré que lo que tienes no define en lo que puedes convertirte", escribió Lyles en una publicación el domingo por la noche en la red social X.
Lyles no lideró el sprint hasta los últimos cinco milisegundos de la carrera, momento en el que logró ponerse por delante de Thompson y asegurar su victoria. Esta capacidad para recuperarse y acelerar en los momentos cruciales de la competencia demostró por qué Lyles es considerado el hombre más rápido del mundo.
"Agradezco a Dios todos los días por llevarme a través de todas y cada una de las rondas. Saludable, mental y físicamente”, dijo.
