La cantante dominicana, Lilly Goodman publicó en sus redes sociales que tal como le pasó en las primeras elecciones a la presidencia de Trump, le volvió a pasar ahora: “Las dos veces que ha ganado lo he soñado con meses de anticipación”, indicó.
“Lo he contado solo a mi esposo, mi mamá y mi hermana. Dios siempre me muestra diferentes cosas por medio de sueños, y esta vez, la victoria de Donald Trump la pude ver con más detalle aún”, añadió.
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Las controversias no tardaron en llegar. Uno de los seguidores de Instagram confrontó a Goodman diciendo: “Pero ¿dónde es que han sacado que Trump es siquiera una buena persona?”. A lo que la cantante respondió: “Dios está en control. Si fuera por bondad muy pocos se pudieran postular, pero alguien tiene que ser elegido. Nadie dice que este hombre es bueno y perfecto. La esperanza no está en él es en Dios. Por eso este llamado es para orar. Si hubiese ganado otra persona también había que motivar a orar”.
Lilly había asegurado en su publicación que “cuando me pasa esto, no me pongo a publicar y a discutir con nadie nada, lo que hago es elevar la oración con más enfoque porque por algo Dios me da la revelación”.
Según dice Goodman, ella quiere llamar a la oración por el país y por el presidente electo. “Si un país junto con su Presidente ponen a Dios en primer lugar y él como mandatario hace un buen trabajo, todos somos beneficiados. Pero si el país y su presidente sacan a Dios de la ecuación somos altamente perjudicados. Esto no es un asunto de partidos y preferencias, esto es guerra espiritual”, señaló.
Aunque sus seguidores hicieron un hilo enorme de idas y vueltas, defendiendo o defenestrando a la figura del presidente electo de los Estados Unidos y de la misma cantante. También hay una realidad evidente y es que muchos se quedaron con la foto y la primer frase y no terminaron de leer la publicación donde Lilly asegura que “la oración transforma las cosas; es la llave que abre y cierra” y lo suyo es un llamado a la oración para llevar Paz a la nación que la recibió con oportunidades que no tenía en su tierra natal.