Las intensas inundaciones que afectan a España han golpeado especialmente a la comunidad de Valencia, donde iglesias evangélicas han solicitado apoyo en oración para enfrentar el temporal. Según informa Protestante Digital, el fenómeno de la DANA (depresión aislada en niveles altos) ha desatado lluvias torrenciales, causando inundaciones en varias zonas de la ciudad. Líderes evangélicos expresaron su preocupación, destacando la necesidad de unidad y oración en estos momentos.
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“Nos ha llegado el agua como si fuera el mar”, informó el periodista Joel Forster de Protestante Digital – ubicado en Valencia - al describir la magnitud de las inundaciones. “Tenemos una riada enorme. El barranco se ha desbordado y se ha llevado por delante puentes y ha llegado hasta nuestro barrio, que está lejos”, agregó Forster.
Mientras tanto, el periódico El País reportó que, debido al temporal, el nivel de emergencia ha aumentado, activando medidas de rescate y socorro en varias regiones del país. Las autoridades han advertido a los ciudadanos que mantengan precaución y sigan las recomendaciones para evitar tragedias adicionales.
Esta crisis ha movilizado a las iglesias evangélicas, quienes han abierto sus instalaciones para recibir a los damnificados y están colaborando en redes de asistencia.
“Nos ha llegado el agua como si fuera el mar” - Periodista Joel Forster
Líderes cristianos, en medio de esta adversidad, han resaltado la importancia de apoyar espiritualmente a los afectados. “Debemos unirnos y orar por nuestra comunidad y nuestros hermanos en Cristo”, enfatizaron, haciendo un llamado a toda la comunidad evangélica a unirse en oración y apoyo.
La Federación de Entidades Religiosa Evangélicas de España (FEREDE), emitió un comunicado manifestando sus condolencias para las familias afectadas, “Hacemos nuestro el dolor de tantas familias diezmadas que hoy lloran a sus seres queridos, rogando a Dios que su consuelo y paz puedan alcanzarles y abrazarles en este momento tan difícil […] Oramos para que, aún en una situación tan dolorosa como ésta podamos encontrar motivos para la esperanza, en la respuesta solidaria de la sociedad”, expresó la FEREDE.
Además de la comunidad religiosa, el gobierno regional ha desplegado a servicios de emergencia para gestionar la situación y llevar ayuda a las zonas más afectadas. Las fuertes lluvias han dejado a miles de personas sin electricidad y acceso a recursos básicos, generando también preocupación por el futuro cercano y el impacto en la infraestructura local.
Mientras las lluvias continúan, las iglesias evangélicas mantienen su compromiso de ayudar a quienes más lo necesiten. Según El País, el temporal aún no muestra signos de amainar, y el pronóstico del clima sugiere que podrían producirse más lluvias en las próximas horas.