El delantero neerlandés Cody Gakpo, jugador del Liverpool FC, evitó una suspensión por parte de la Asociación de Fútbol (FA) tras su celebración durante la victoria 5-1 sobre el Tottenham Hotspur el pasado domingo, según informó el portal Empire of the kop. Esta es la misma organización que impulsó la iniciativa del brazalete LGBTQ y luego persiguió al jugador estrella de Inglaterra, Marc Guehi, después de que escribiera "Yo amo a Jesús" en su brazalete de arcoíris.
Después de anotar el tercer gol del equipo en el partido que aseguró el título de la Premier League, Gakpo se quitó la camiseta para revelar una camiseta interior con el mensaje “I Belong to Jesus” (“Pertenezco a Jesús”), lo que le valió una tarjeta amarilla obligatoria por parte del árbitro Thomas Bramall por quitarse la camiseta.
Según las reglas de la International Football Association Board (IFAB), se prohíbe mostrar eslóganes, declaraciones o imágenes de carácter político, religioso o personal. Aunque se informó que Gakpo podría enfrentar acciones disciplinarias por esta aparente infracción, la FA decidió emitir solo una advertencia formal, recordándole sus responsabilidades en relación con esta normativa.
Este incidente no es el primero en la temporada en que la FA recordó a los jugadores de la Premier League sobre las regulaciones de indumentaria. Por ejemplo, el capitán del Crystal Palace, Marc Guehi, fue reprendido por usar brazaletes arcoíris en partidos consecutivos con las frases “I love Jesus” y “Jesus loves you”.
La decisión de la FA de no imponer una sanción más severa a Gakpo es mirada por algunos como una muestra de sentido común, evitando una controversia mayor por un acto que, aunque infringe las reglas, no tuvo la intención de provocar. Sin embargo, también reavivó el debate sobre la aplicación de las normas que regulan las expresiones personales en el fútbol profesional.
En el contexto internacional, este caso destaca la tensión entre la libertad de expresión de los jugadores y las regulaciones establecidas por las autoridades futbolísticas para mantener la neutralidad en el deporte. Mientras que algunos argumentan que las expresiones religiosas deben permitirse como parte de la identidad personal, otros sostienen que el campo de juego debe permanecer libre de mensajes que puedan interpretarse como divisivos.
Gakpo, conocido por su fe cristiana, compartió en entrevistas anteriores cómo la fe en Jesucristo influye en su vida y carrera. En una conversación con ESPN, relató cómo, durante su etapa en el PSV Eindhoven, dejó en manos de Dios la decisión sobre su futuro profesional, interpretando el número de goles que anotara en un partido como una señal divina.
Este episodio se suma a una serie de situaciones en las que la fe y el fútbol se entrelazan, planteando preguntas sobre cómo las instituciones deportivas deben manejar las expresiones personales de los jugadores sin comprometer los principios de inclusión y respeto que promueven.
Por ahora, la advertencia a Gakpo parece cerrar el asunto, permitiéndole centrarse en su desempeño en el campo mientras el Liverpool celebra su reciente título de liga. Sin embargo, el debate sobre la expresión personal en el deporte profesional probablemente continuará, especialmente en una era donde las plataformas públicas amplifican cada gesto y declaración de los atletas.
