A menos de dos meses de la asunción de Claudia Sheinbaum como presidente de México, la Iglesia Católica hizo un llamado tanto a las autoridades electas como a los ciudadanos para “trabajar juntos como país por la reconciliación”.
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México vive actualmente el proceso de transición entre el gobierno saliente del presidente Andrés Manuel López Obrador que termina el 30 de septiembre, y el entrante, liderado por Sheinbaum.
“Cuando hablamos de reconciliación no nos referimos a una paz frágil, mucho menos a un abrazo impuesto o a un compromiso que solo busca tener contentos a grupos que piensan diferente. Una reconciliación que tenga estas bases individualistas y con intereses parciales corre el riesgo de romperse rápidamente”, señalaron desde la Arquidiócesis Primada de México.
La Arquidiócesis instó a la presidente electa a aprovechar el proceso de transición para “construir una reconciliación con bases sólidas, que ayude a superar los conflictos que nos dividen, fortalecer la unidad nacional y abrir las puertas al diálogo y la escucha mutua”.
También dijo que el camino a la reconciliación “no significa decidir por el otro, y tampoco encasillar a todos en esquemas preestablecidos; no es una lucha de buenos contra malos o un enfrentamiento de ideologías. Significa aprender a caminar juntos”.
Además, invitó a los ciudadanos a unirse a esta labor colectiva, ya que “la construcción de un país unido requiere la suma de esfuerzos”. Consideró que “la mayor parte de las actividades de reconciliación ocurren en grupos pequeños, en las familias, entre los amigos, en el trabajo, y de ahí crecen hasta fortalecer una acción que puede unir a millones”.
“La construcción de un país unido requiere la suma de esfuerzos” - Arquidiócesis Primada de México
El editorial de la Arquidiócesis menciona un documento de la Conferencia del Episcopado Mexicano denominado “Llamado a la paz y al rechazo a la violencia” que fue presentado en marzo pasado al que la entonces candidata a la presidencia suscribió con diferencias respecto a algunos aspectos polémicos, donde no compartió la evaluación “pesimista” de la Iglesia del momento actual en México.
“Tampoco coincido con la visión de que prevalecen el miedo, la impotencia, la desconfianza y la incertidumbre”, dijo la entonces candidata, al rechazar las afirmaciones que catalogan de “insuficientes” las estrategias de seguridad en México, según información de la agencia de noticas EFE.
La Iglesia católica realizó un primer llamado a repensar las estrategias de seguridad en 2022, cuando ocurrió el asesinato de dos jesuitas al norte del país que sacudió a la población y a la jerarquía eclesiástica. El mensaje se reiteró en 2023 con un diálogo nacional que convocó a organizaciones de la sociedad civil, académicos, víctimas, empresarios y otras voces que conversaron sobre justicia, seguridad y paz.
