La situación de la libertad religiosa en América Latina es diversa y compleja, con desafíos significativos que requieren atención y acción por parte de las autoridades y la sociedad en general. Recientemente, se reportaron casos en países como Colombia, México, Cuba, Nicaragua y Haití, que ilustran los desafíos que enfrentan las comunidades religiosas en la región.
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Es por eso que la Comisión de Libertad Religiosa de la Alianza Evangélica Latina (AEL) avanza en la elaboración de un plan estratégico y operativo llamado: “Agenda 23-33” (en referencia a la década que va del año 2023 al 2033).
Agustín Aguilera, coordinador de la comisión que redacta el proyecto explicó que “es una alternativa a la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, donde el gran ausente es [justamente] la libertad religiosa”.
Con el objetivo de adelantar en la creación de esta agenda alternativa, en días recientes se llevaron a cabo dos encuentros –uno en Perú y el otro en Argentina– para la “Construcción del Pensamiento Evangélico y la Agenda 23-33 sobre la Libertad Religiosa”.
El presidente del Concilio Nacional Evangélico del Perú, pastor Eduardo Concha, recordó que el artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos dice que: “Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia”.
El pastor Concha expresó que, “la misión que tiene la Iglesia de Cristo en este mundo es cumplir con la Gran Comisión que es el foco principal de la Iglesia”. Además, “no hay ninguna institución en el mundo que haga eso. La Iglesia sí lo tiene por mandato divino”, indicó.
Las discusiones para la creación del nuevo plan en pro de la libertad religiosa en la región se realizaron primero en Lima bajo el nombre de “Foro Andino”, y continuaron en Buenos Aires, como “Foro Regional del Sur”. En la segunda reunión la anfitriona fue la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA).
Abogados, políticos, pastores, periodistas y teólogos, provenientes de Chile, Bolivia, Perú, Brasil, Uruguay y diferentes regiones de Argentina se dieron cita y conocieron las situaciones actuales de la libertad religiosa en los países participantes del foro.
“Se definieron objetivos regionales con el compromiso de trabajar durante el año para elaborar un plan de acción definitivo sobre libertad religiosa”, señaló a Diario Cristiano, la Dra. Marilina Hotton, integrante del equipo de abogados de ACIERA. “El foro resultó valioso en términos de instrucción, conversación y producción, subrayando la necesidad de seguir colaborando en el desarrollo y la propuesta de la Agenda 23-33”, agregó Hotton.
“Los participantes se marcharon con nuevas perspectivas y un renovado entusiasmo para contribuir al desarrollo de la Agenda 23-33” - Dra. Marilina Hotton.
Durante el evento, se exploró la historia cristiana, destacando la significativa contribución de los cristianos evangélicos en los movimientos democráticos, el desarrollo y la educación en América del Sur. También se analizó la situación de la libertad religiosa y los derechos humanos en los países participantes, estableciendo paralelismos y señalando la necesidad de avanzar en el fortalecimiento de la autonomía de las iglesias y la neutralidad del Estado, evitando intromisiones ideológicas en las confesiones religiosas.
El Foro Regional del Sur concluyó dejando en claro la importancia de la libertad religiosa en la región y la necesidad de continuar trabajando juntos para proteger y promover estos derechos fundamentales.
“Los participantes se marcharon con nuevas perspectivas y un renovado entusiasmo para contribuir al desarrollo de la Agenda 23-33”, expresó Hotton. “Este evento marcó un paso significativo hacia un futuro donde la autonomía de las iglesias y la neutralidad del Estado sean respetadas y fortalecidas, promoviendo un entorno de verdadera libertad religiosa para todos”, concluyó la abogada experta en temas de libertad religiosa.