
En un contexto político marcado por la polarización y la incertidumbre electoral en Honduras, líderes evangélicos hicieron un llamado urgente al perdón y al arrepentimiento como vías para restaurar la nación. Durante su participación en el programa “Frente a Frente” del Canal 5 de la televisión hondureña, destacaron la necesidad de una transformación moral profunda en la clase política.
Mario Banegas, presidente de la Asociación de Pastores de Tegucigalpa, según informó el portal TuNota enfatizó que “el perdón es esencial en un momento de trascendencia política en el país”. Banegas señaló que esta virtud se ha perdido en todas las clases sociales, incluyendo los políticos y religiosos.
“Hemos perdido esa palabra tan poderosa que abre tantas puertas y genera tantas oportunidades”, añadió Banegas, resaltando que el perdón puede devolver la esperanza y la fe en un futuro diferente para el país.
Por su parte, Gerardo Irías, presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras, afirmó que los políticos deben ser confrontados con la verdad debido a los errores cometidos.
“Los políticos en este país han cometido sus errores, pero (…) podemos tener un cambio”, expresó Irías. Subrayó la importancia de que esta confrontación provenga de quienes tienen la autoridad moral para hacerlo, como las iglesias y los medios de comunicación.
Este llamado se produce en medio de tensiones entre el Consejo Nacional Electoral (CNE) y las Fuerzas Armadas, quienes se han responsabilizado mutuamente por irregularidades en las elecciones primarias. La división dentro del CNE y las acusaciones cruzadas han exacerbado la polarización política en el país.
En este contexto, los líderes evangélicos instan a la clase política a adoptar una actitud de humildad y arrepentimiento, siguiendo principios bíblicos como los expresados en Joel 2:12-13: “¡Arrepiéntanse ahora mismo y cambien su manera de vivir! […] ¡Arrepiéntanse y vuelvan a mí, pero háganlo de todo corazón, y no solo de palabra!” [los pastores utilizaron Traducción en Lenguaje Actual].
El mensaje de los pastores evangélicos destaca la necesidad de una renovación espiritual y moral en la política hondureña, apelando al perdón y al arrepentimiento como fundamentos para la reconciliación y la construcción de un futuro más esperanzador para el país.