Producto del proyecto denominado “Evangelismo Kids” de la Iglesia Adventista, Jhosep Carrión, de 10 años, da estudios bíblicos a sus amigos del vecindario y ya tres de ellos fueron bautizados. Una vez a la semana junto a Teresa, su madre, organiza un encuentro donde invita a sus amigos a escuchar una historia acerca de Jesús que él mismo les relata.
"Evangelismo Kids" es una escuela de evangelismo preparada para niños. Desde pequeños pueden descubrir sus dones y ser misioneros, contando a sus amigos del amor de Jesús, y así es el testimonio de Jhosep. El proyecto debe ser acompañado por los padres y maestros de la escuela bíblica, por tratarse de un discipulado intencional. Hay un “Manual para padres”, una presentación “Power Point con la capacitación para líderes y maestros de la escuela” y un “Manual para Niños” para realizar sus actividades prácticas en el programa.
Jhosep conoció el proyecto mediante sus clases en la iglesia. Su maestra vio en él cualidades para predicar y compartir la palabra de Dios, por ello lo animó a ser parte de esta estrategia de la iglesia que busca que los niños desarrollen sus dones espirituales para el cumplimiento de la misión.
Luego de pasar por un periodo de desavenencias familiares, Dios los ayudó a salir adelante con la ayuda de los congregantes de la iglesia, que hoy es su comunidad de fe. Ellos iban constantemente a visitarlos para orar por su situación. La familia perseveraba en la fe, incluso estaban involucrados en las actividades parroquiales, de manera especial las de profundización del estudio bíblico. Es ahí que Jhosep se integró al Club de Aventureros, donde comenzó a tener una relación personal con Dios y a conocer quién es Jesús.
Actualmente forma parte del Club de Conquistadores “Comando de Jesús”, donde también desarrollan actividades recreativas, de acción, bienestar social y deportes, pero sobre todo aprenden de la vida cristiana en su totalidad.
"Me siento muy feliz, me gusta predicarles y enseñarles a mis amigos sobre la palabra de Dios”, contó el pequeño evangelista, quien de adulto quiere seguir el ejemplo de los predicadores de la Biblia.
Jhosep sigue poniendo en práctica el método de Cristo y sus pequeños vecinos llegan a su casa con buen ánimo. Entre ellos: Yanira, Michael y Alexandra, quienes decidieron entregar sus vidas a Dios luego de recibir estudios bíblicos y se bautizaron. Los padres de estos niños no son miembros de la iglesia, sin embargo apoyan que sus hijos conozcan más a Dios. Además sus comentarios son positivos sobre los temas de estudio, los comparten y comenzaron a interesarse por asistir a la iglesia al igual que sus hijos.
Con el consentimiento de sus padres y con acompañamiento familiar, Jhosep se sigue desarrollando como evangelista. “Mi hijito a su pequeña edad, y de acuerdo a lo que sabe, está compartiendo el mensaje de que el Señor viene pronto. Toda la familia lo apoyamos”, expresó contenta su mamá.