Durante más de tres décadas, John Burke ha estudiado miles de experiencias cercanas a la muerte y ha descubierto un sorprendente punto en común entre todas ellas: cada individuo, independientemente de su trasfondo religioso, experimenta al Dios de la Biblia.
“Entrevisté a 70 personas de todos los continentes y descubrí que todos habían encontrado al mismo Dios, independientemente de su cultura, etnia o religión. Dios es el Dios de todas las naciones”, declaró Burke a The Christian Post.
Burke, fundador, junto con su esposa Kathy, de Gateway Church, una iglesia multisede con sede en Austin (Texas), relata algunas de estas historias en su libro “Imagina al Dios del Cielo: Experiencias Cercanas a la Muerte, la Revelación de Dios y el Amor que Siempre has Deseado”, desde la experiencia de un ingeniero hindú que se encuentra con un “brillante dios del rayo” hasta la de una enfermera de Brownsville a la que el propio Jesús le dice que difunda el mensaje del amor y la redención.
Estas historias, según Burke, forman parte de su argumento más amplio de que las experiencias cercanas a la muerte son la “nueva apologética global” de Dios, destinada a afirmar Su existencia, la realidad de la vida después de la muerte y Su deseo de una relación con cada persona.
“Todos dicen: ‘Nunca quise alejarme de Su presencia, y de toda la belleza que experimenté, de todas esas grandes reuniones con personas a las que quiero y que se han ido antes que yo, nada puede compararse a estar en esta presencia’”, dijo Burke.
Aclaró que, aunque todas las personas se encuentran con el Dios de la Biblia durante una experiencia cercana a la muerte, no está sugiriendo que todas vayan a acabar en el Cielo. Burke dijo que no cree que estas personas estén experimentando una “entrada en la eternidad” o un “túnel de la muerte”, sino que se encuentran con “algo intermedio”.
“Esto puede confundir a algunos cristianos”, dijo. “Pero me gusta recordarles que el apóstol Pablo no era creyente en Jesús, estaba arrestando cristianos y haciendo que los encarcelaran y mataran cuando el mismo Dios de la luz brillante se le apareció en el camino de Damasco en Hechos 9”. Cuando Pablo pregunta: “¿Quién eres, Señor?”, él responde: “Soy Jesús”. Pero Jesús no le dijo lo que tenía que hacer y no le explicó el mensaje del Evangelio.
“Creo que Dios está diciendo al mundo: ‘Soy real. El cielo es real. El infierno es real. Y amo a cada persona de cada nación, quiero que seas mi hijo a través de lo que hice a través de Jesús, para que puedas volver tu corazón a mí y ser hecho justo conmigo’”.
“Entrevisté a 70 personas de todos los continentes y descubrí que todos habían encontrado al mismo Dios, independientemente de su cultura, etnia o religión".
Burke fue un ingeniero agnóstico, pero su búsqueda de la verdad comenzó en el entorno más personal: en la habitación de un hospital, junto a su padre moribundo. Fue allí, en medio de la lucha por la pérdida inminente, donde encontró las primeras semillas de lo que se convertiría en una investigación de por vida sobre la evidencia de una vida después de la muerte y la realidad de Dios.
“Durante los últimos 35 años, he sentido una curiosidad insaciable por averiguar qué son estas experiencias cercanas a la muerte y cómo encajan con lo que la Biblia ha estado diciendo todo el tiempo”, dijo.
El libro “Imagina al Dios del Cielo”, respaldado por Lee Strobel, Carey Nieuwhof y médicos, es la continuación del libro de Burke más vendido según el New York Times, “Imagina el Cielo”, del que se han vendido más de un millón de ejemplares.
Su último libro, según explicó a The Christian Post, es la culminación de tres décadas de meticulosa investigación y aborda los conceptos erróneos y las preguntas más comunes sobre la autenticidad de las experiencias cercanas a la muerte, especialmente cuando algunos relatos han sido ampliamente desacreditados.
Para el libro, se sometió a un riguroso análisis de las experiencias relatadas por personas de diversas procedencias, incluidos profesionales de la medicina como cirujanos de la columna vertebral y anestesiólogos, que, según Burke, “tienen mucho que perder si se inventan historias disparatadas sobre entrar y ver a Jesús”.
“Lo que intento mostrar no son las experiencias aisladas, sino los rasgos comunes”, afirma.
Estas experiencias cercanas a la muerte, sostiene Burke, no sólo ofrecen una visión del más allá, sino también profundas implicaciones para la vida actual de un creyente.
“A medida que aumenta el mal, Dios tiende a aumentar su testimonio en la Tierra, y creo que hoy está haciendo lo mismo”, afirma. “Lo que intento es mostrar cómo eso se alinea con las Escrituras para convencer a los escépticos, pero también para ayudar a los cristianos a ver cómo es Dios en realidad”.
“Todos ponemos a Dios en una caja hasta cierto punto porque somos finitos”, añadió. “Y sin embargo, la verdad es que Dios es mucho más misterioso y glorioso, hermoso, grandioso y soberano, omnipotente, omnisciente de lo que podemos imaginar. Pero, ¿qué significa eso? ¿Y cómo nos afecta hoy? Dios también es agradable, simpático, cercano y divertido. Sin embargo, los cristianos no suelen pensar así. Intento mostrar: ‘Esto está en las Escrituras, pero también es lo que experimenta esta gente’”.
Sin embargo, Burke advirtió contra la formación de creencias teológicas basadas únicamente en estas experiencias, señalando el riesgo de encontrarse con relatos “cuestionables” a medida que ganan popularidad. En cambio, diferenció lo que la gente relata de sus interpretaciones personales, influidas por sus antecedentes culturales y religiosos.
Por ejemplo, Burke relató la historia de Nia, una adolescente africana que, tras una experiencia cercana a la muerte, describió el encuentro con un ser de luz al que identificó como la diosa Durga, a pesar de que la experiencia reflejaba fielmente la concepción cristiana de Dios.
“No creo que debamos obtener nuestra teología del más allá o de Dios sólo de las experiencias cercanas a la muerte”, dijo. “Sinceramente, creo que es muy peligroso. Cuanto más populares sean estas experiencias, más cuestionables serán. Aunque esa persona haya tenido una experiencia válida y lo que relata sea exacto, vuelve e interpreta lo que vio según su propia visión del mundo”.
En un momento en que el mundo se debate entre la realidad espiritual y la vida después de la muerte, Burke espera que su libro contribuya oportunamente al debate e invite a lectores de todas las procedencias a explorar la posibilidad de un amor y una vida más allá de ésta.
“El mismo Dios no sólo ha aparecido en nuestra era de la reanimación médica moderna y de las experiencias cercanas a la muerte; es el mismo que Dios ha estado revelándose a través de los profetas judíos y a través de Jesús y ha puesto pruebas increíbles en la historia”, dijo Burke. “Las Escrituras tienen que ser la clave interpretativa de las experiencias cercanas a la muerte, y no al revés”.
Imagine the God of Heaven ya está disponible.
