Bajo el inspirador lema "La educación es transformación", la Asociación Glocal de Comunicadores, una organización sin fines de lucro con miembros en diferentes países y sede en Miami, Florida, inició una campaña con el fin de respaldar a 35 niños de Bayunca, a pocos kilómetros de Cartagena, Colombia, con la entrega de kits escolares para promover la importancia de la educación como motor de cambio.
Ubicado a 11 kilómetros de Cartagena, el corregimiento de Bayunca cuenta aproximadamente con una población de 131.826 personas, según estimaciones gubernamentales. Con un alto nivel de pobreza, un crecimiento delictivo que asombra, y es literalmente “la parte donde no llevan a los turistas”.
En el proyecto se encuentran involucradas dos hermanas que salieron de ese lugar y hoy son profesionales de la comunicación residentes de la ciudad de Miami, Florida. Se trata de Fayra Castro y Mónica Ortíz, fundadoras de la Asociación Glocal de Comunicadores que se dedica a vincular a periodistas, comunicadores, y referentes de prensa. Ellas, personalmente lideraron esta iniciativa en un acto de compromiso con el desarrollo de su ciudad natal.
“Desde que nosotros creamos la Asociación quisimos que los comunicadores sirvieran a su comunidad. Porque actualmente apoyamos iniciativas, hacemos comunicados, realizamos entrevistas, lo cual es muy bueno. Pero a través de la Asociación queremos ir a esos lugares y servir a la comunidad”, señaló Castro.
La iniciativa se concretó a través de la colaboración con la Fundación El Valle de Berakah, liderada por la pastora Yudis Olivares. Esta fundación se encuentra comprometida con diversas obras sociales en la comunidad de Bayunca. La otra parte de la sociedad fue por medio de la representante de la Asociación Glocal en la costa colombiana, Astrid Chávez García, comunicadora social y periodista cartagenera, compañera de estudios Fayra en la universidad y residente de Cartagena.
“Nosotras somos de allí, de Cartagena. En el año 2022 quisimos enviar juguetes a una zona pobre de nuestra tierra. Y vimos la necesidad, aunque los juguetes a los niños les encantó, pero nos hicieron saber que no tenían maletín para llevar sus cositas. Que sus cuadernos eran reutilizados, es decir que tenían que borrar y volver a escribir en sus hojas ya usadas. Allá tenemos a Astrid Chávez que estudió conmigo en la universidad y ahora trabaja en la asociación. Así que ella le contó a su pastora y por medio de ellas hicimos el contacto con esa comunidad. Y en el 2023 quisimos ayudar a esa misma comunidad pero con útiles escolares”, relató Fayra Castro.
Además la periodista agregó que “nos dimos cuenta de que muchas organizaciones van para navidad y hacen actividades, pero a la hora de recolectar juguetes tal vez no hay tanto [apoyo]. Por eso fue un éxito haber llevado estos kits. Los niños estaban felices de recibir sus mochilas, sus cartucheras, sus lapiceros. Estaban súper contentos. Con esto queremos motivarlos e incentivarlos a que se queden en los colegios porque ese lugar es un área de delincuencia y muchos niños se van por las drogas, la delincuencia, y otras opciones fuera del colegio. Y si además no tienes cuadernos, ni útiles escolares, el incentivo es menor. De esta manera queremos incentivarlos a que continúen educándose, que crezcan y crean en esos proyectos que Dios ha puesto en sus corazones, que puedan avanzar y puedan ser transformadores en su sociedad”.
La campaña destaca las áreas afectadas por la pobreza que requieren atención urgente, incluso en la ciudad reconocida turísticamente como Cartagena. De esta manera quienes lograron alcanzar una vida próspera ahora son el canal de ayuda y bendición a quienes más lo necesitan. Estas mujeres se mostraron muy felices de poder servir a esta comunidad. “Esperamos que estos niños puedan servir y honrar a esa comunidad como lo estamos haciendo nosotros”, finalizó Fayra.